Leo con desasosiego que se prepara una TV Movie sobre el accidente aéreo de Spanair que tuvo lugar en Barajas hace un par de años y me pregunto si estamos preparados en España para este tipo de producciones. De un tiempo a esta parte se han hecho populares las películas o miniseries para televisión basadas en hechos noticiables, casi todos ellos luctuosos, pero que los medios han sacado de sus informativos para convertirlos en protagonistas de otros programas de actualidad, logrando dos cosas prácticamente antagónicas: por una parte, que el espectador se identifique con los protagonistas de la historia, familiares de víctimas de asesinatos crueles o secuestros desgarradores, que muestran su dolor y su lucha en las pantallas de televisión y, al tiempo, que este mismo espectador afronte todas las noticias en torno al caso desde la distancia que provoca la sobreexposición en los medios, convirtiendo la tragedia en una historia más de las que se reciben a través del televisor. Es esta última consecuencia la que permite hacer después películas que rematan así la sensación de haber leido o haber «vivido» una historia, más que un desgraciado evento real.
En EE.UU. son especialistas en hacer este tipo de ejercicios de distancia o quizá en su caso podríamos hablar de terapia colectiva, algo que en España no es tan común y que me lleva a pensar si estamos preparados para una TV Movie sobre el accidente aéreo que acabó con la vida de un centenar de personas y que, entre otras cosas, motivó la retirada de un episodio de Hospital Central por el desgraciado parecido con la vida real (bien es cierto que el episodio no se retiró del todo, sino que pasó a emitirse más adelante, cuando la herida no era tan reciente).
Me cuesta creer que la gente quiera ver este tipo de películas, lo mismo da que tengan como protagonista a una inocente adolescente, a un político de un pequeño pueblo o a un puñado de viajeros de un avión, yo personalmente lo encuentro desasosegante y no me gusta enfrentarme a este tipo de obras basadas en hechos reales que conozco. Nos hemos cansado de ver películas en la sobremesa que desde el principio avisan de que su relato está basado en la realidad, pero algo en nuestra cabeza convierte rápidamente esas historias en un elemento de ficción más, una ficción que no duele, que no atemoriza, que simplemente entretiene (a veces, las más, ni eso).
Pese a mis reticencias, lo cierto es que los datos avalan la idoneidad comercial de estas TV Movies, que habitualmente logran atraer a una audiencia mayoritaria y que permiten a las cadenas seguir pensando en producirlas ¿somos verdaderamente tan morbosos? ¿o se trata de esa capacidad para aislarse de la realidad que hace que lo que vemos ya no duela y parezca una historia de ficción más.
Yo creo que precisamente por no estar preparador, va a ser éxito de audiencia. Porque los humanos somos así, masocas. Nos va el morbo de la muerte, ver como se la pegan aviones y trenes y como la gente chilla mientras se quema. Todo para verlo y decir: «qué desgracia más grande».