María Teresa Campos ha estado en el plató de Está Pasando. Dos años después de morder la mano que durante años le dio de comer y de acusar a la cadena de persecución por airear los trapos sucios (o deberíamos decir tórridos) de su hija Terelu, la presentadora vuelve aTelecinco para promocionar su programa de radio, una radio quesigue siendo la más floja en audiencias (pese a contar con grandesy renombrados profesionales de la radio) yque debe buscar promoción como sea.
Por eso a la Campos no le importa rebajarse a entrar de nuevo en esa casa que tan mal la trató, donde todos los directivos estaban obsesionados con hundirla y donde uno de sus mandamás no merecía otro calificativo que el de «gilipollas».
Presume María Teresa de que en su camerino había un ramo de flores, haciéndonos ver que todo va bien entre ella y la cadena y sobre todo justifica su presencia en el programa afirmando que ahora si que se puede ir a Telecinco porque, con programas como Está pasando se está devolviendo la dignidad a la cadena
«recuperando esas cosas que se hacían en televisión por las tardes, que es hacer corazón sin dañar a nadie, hacer crónica social, estar al pie de la noticia?»
Y lo dice apenas un par de días después de empezar su programa en radio dejando caer la que puede ser la noticia real del otoño-invierno, la posible separación de los Duques de Lugo (debe ser que ellos mismo se lo pidieron porque no sabían como decírselo a Papá) eso si, con toda la cobardía posible, diciéndolo todo sin dar nombres…
María Teresa Campos y su hija siempre han resultado prepotentes. Echo de menos la imitación que hacían de Mª Teresa en Hommo Zapping, era buenísima. Estaba super bien hecha.
Por cierto, gracioso detalle en el que no me había percatado: «La verdad contada con valentía» Luego no dice las cosas claras. Interesante.