Genial esta entrada de Eva Sanagustín en la que nos cuenta de una forma que reconoceremos todos rápidamente esa sensación televisiva que se tiene cuando, sentado en una cama de hotel, cualquier teléfilo siente en su primer repaso a un dial extranjero.
Que cierto es eso de que te quedas prendado de cualquier corte publicitario, viendo anuncios de productos que no conoces, versiones nuevas de otras cosas que te intentan vender también en España y versiones internacionales de otros que ya conoces pero que en un idioma extranjero recobran su frescor e interés.
Que cierto es también que CSI se ha convertido en el clásico por excelencia de todas las televisiones mundiales, pues vayas donde vayas, siempre encuentras algún canal que la emite, casi siempre en versión original subtitulada, lo que te permite seguirla si tienes la mala suerte de no entender ni palabra de lo que emiten el resto de canales, como me ha pasado a mí estas vacaciones. Unas vacaciones en las que casi lo único que he logrado entender ha sido una película española, doblada al inglés y subtitulada en griego.
Pero incluso este contratiempo de no entender lo que montones de programas emitidos en una televisión extranjera intentan transmitir no es un impedimento para que el buen teléfilo se quede un buen rato viendo la tele. Ya sea intentando entender el italiano o el portugués, alucinando con lo complicado del griego o el polaco o aburrido de tantos canales alemanes imposibles de descifrar, la televisión logra captar el interés del buen aficionado con sus novedosos platós, con sus costumbristas series o con el eterno recurso del que no entiende ningún otro canal: la omnipresente CNN.
Yo suelo ir a Suiza por cuestiones familiares, y allí tienen en la tv por cable canales alemanes, suizos, italianos, franceses e ingleses; me encanta repasar la lista casi interminable a ver qué descubro. Hace no demasiado la serie que se podía ver en cualquier idioma era Friends (con lo que da igual si entiendes el idioma o no: nos los sabemos de memoria :P), y el canal que suelo poner cuando no entiendo nada es Eurosport. Hablen en el idioma que hablen los locutores, el deporte sí que es una lengua universal que no necesita subtítulos 😉
Un saludo