Sí, a mí también me llamó la atención el pasado sábado el escaso número de esteladas que había en el estadio Vicente Calderón en el que tenía lugar la final de la Copa del Rey. Tras la prohibición de llevarlas y la posterior suspensión de esta decisión por parte de políticos y jueces respectivamente, todo apuntaba a sonora pitada al Rey y miles de banderas independentistas en la grada culé. Pero esto no pasó, o al menos no fue algo que desde su casa pudieran apreciar ninguno de los espectadores del partido.
Una vez pasada la resaca de la competición futbolística, las críticas se han vuelto hacia la realización del partido, acusando a sus responsables de encubrir lo que era un clamor en el campo, representado en esta marea de banderas y pitos. Desconozco de qué manera un espectador desde su casa puede saber si había muchas o pocas o de qué modo un espectador en el campo puede saber si en casa se ve lo mismo que en el estadio, pero sí parece evidente que se esperaba un ambiente bien distinto al que proyectaron las cámaras.
Ante las protestas, Telecinco ha tenido que salir a defender su trabajo, en este caso informando de que la señal del partido no era responsabilidad suya, sino de la Federación Española de Fútbol que, en honor a su nombre y sus funciones, prestó más atención al partido que a las cuestiones políticas que se manifestaban entre sus aficionados. Y aquí es donde la razón asiste a la realización, pues no nos encontrábamos ante un evento de carácter político, sino a un partido de fútbol y eso es lo que debería prevalecer, sobre todo si recordamos que la señal se vende a otros países, por la calidad de la competición y no por lo que esta ayude a amplificar otras cuestiones ajenas al deporte.
Si había o no esteladas, si había muchas o pocas, es algo que a mí personalmente me interesaba, pero entiendo que la retransmisión deportiva quizá no sea el sitio para comentarlo o destacarlo y sí, por ejemplo, en el informativo, donde podrían dar menos minutos al tema deportivo y mas al político, algo que tendría mucho más sentido.
Por supuesto, las críticas que se han vertido hacia Telecinco por esta cuestión se quedan en mera anécdota ante lo que hubiera ocurrido de haberse emitido la señal en TVE, con acusaciones de censura, manipulación y otras perlas, y petición de dimisiones a todos los implicados en la cadena de mando, cuando la realidad hubiera sido la misma: que se trataba de una competición deportiva y eso era lo que había que contar en las dos horas que duraba el partido.
¿Que se me antojó extraño? Sí. ¿Que tiene sentido? Pues también.
Todos los años cuando el Barça llega a la final pasa lo mismo ciertos políticos confunden el deporte con la política y se acaba montando un lio por todo, desde donde se hace (no se la perreta que tienen con el Bernabeu), el himno o las banderas. Lo importante es el futbol, el partido (que fue muy emocionante por otra parte), el resto no tenía ni que haberse producido y para mi ya le prestó más atencion de la cuenta la realización al hacer el recorrido por las gradas cuando sonó el himno. Por otra parte algunos tambien se olvidan que eran dos equipos y dos aficiones las que fueron al Calderon lo que hizo que la pitada fuera solo de una sección del campo (no como el año pasado que fue general) mientras la otra lo que hacía era cantar el himno, vamos que se taparon una a otra. Y con las esteladas lo mismo, hubo esteladas pero tambien hubo banderas de España. Si a ciertos políticos catalanes no les hace gracia que no se les haya prestado bastante atención…. problema suyo.