La diferencia entre la realidad y la ficción sigue dando que hablar cuando se trata de series de televisión y en este caso, sus campañas publicitarias. Ha sido en el metro de Nueva York, con motivo de la promoción de la nueva serie de Amazon Man in the High Castle que, ambientada en una hipotética Norte América gobernada por los nazis, había cubierto los vagones de un convoy de metro de banderas norteamericanas y japonesas con símbolos nazis.
Amazon podría haber optado por iluminar uno de los edificios de Times Square con una gran bandera roja con el símbolo nazi a tamaño gigante, una imagen que aparece en la propia serie y que, proyectada en una de las pantallas de la plaza más famosa del mundo hubiera sido, como mínimo, muy desasosegante para quienes aún no han superado aquel drama, aquella brutalidad, para una sociedad que prohíbe explícitamente este tipo de símbolos y que, en estos momentos y aunque en otros términos, vive además un tiempo ciertamente tenso.
Hubiera sido una imagen impactante, hubiera supuesto una verdadera revolución y hubiera logrado una campaña publicitaria por todo el mundo por muy poco dinero. Pero Amazon no ha querido ser tan insensible, o quizá la ley no se lo permita, desconozco los detalles. Sea como sea, se han limitado a forrar esos vagones del metro y aún así se han visto envueltos en la polémica y han optado por retirar la campaña que tan ofensiva resultaba a algunos neoyorkinos.
Polémicas aparte, los que ya la han visto afirman que la serie merece la pena, así que ya tengo deberes.
Pero que sensible que es alguna gente…..La manía de no diferenciar ficción de realidad (como cuando acusas de las películas del espacio de no ser «realistas» por ejemplo)
Por cierto ¿se sabe algo del estreno de esta serie en España?