(OJO SPOILERS DEL EPISODIO TRIBUTO A CORY MONTEITH)
Ayer se estrenaba en EE.UU. el episodio de Glee tributo a la figura de Cory Monteith que, como muchos de vosotros recordaréis, fallecía este verano como consecuencia de su incapacidad para superar la adicción a las drogas. Desde que se conoció la noticia de que la serie haría un episodio especial a propósito de este asunto, las alarmas saltaban en muchos, que aventuraban un episodio lacrimógeno en el que se explotara el dolor de esta pérdida y especialmente el de su principal protagonista, Lea Michelle, novia en la ficción y en la vida real del actor.
Una vez visto, he de decir que me ha parecido un tratamiento de la historia muy correcto y que no han abusado del tema más allá del exceso que pueda suponer dedicar un episodio completo a la pérdida del actor. Es cierto que podían haberse limitado a ese arranque con todos los protagonistas cantando en el escenario, vestidos de negro y con la imagen de Cory al fondo para cerrar, pero también creo que el propio equipo necesitaba hacer algo así a modo de catarsis, como si dedicarle una única canción no fuera suficiente.
Principalmente, creo que hay dos elementos que destacar en la manera en que se ha desarrollado la trama: por una parte, el no comentar en ningún momento cuales han sido los motivos de la muerte del personaje. Vemos tristeza, vemos llanto, vemos comentar a su madre la llamada de teléfono recibida para informarle de la muerte, pero no hay pistas sobre el porqué de su desaparición, ni son necesarias. Salvo que se tratara de una línea argumental a seguir, de un hecho que fuera a tener consecuencias más allá de la ausencia del personaje, da lo mismo qué haya ocurrido exactamente, lo importante es que ya no está y no volverá a aparecer. Se podría haber aprovechado para insistir en el mal que hacen las drogas, en cómo destruyen a quienes las consumen y a quienes quieren a estas personas pero, no habiendo sido un tema tratado hasta el momento en la trayectoria del personaje, hubiera sido difícil de justificar y hasta feo con su memoria. Creo que ha sido un acierto.
A este detalle, debemos añadir la casi total ausencia de Lea Michelle. Uno de los grandes riesgos que se corría en este episodio era el de darle demasiado protagonismo a su «viuda», que pareciera que solo ella había sufrido la pérdida, abusar de su dolor, de su presencia, de sus lágrimas. Sin embargo, en otra muestra más de cómo hacer las cosas, solo aparece en el último tramo del episodio, solo interpreta una canción y solo intercambia diálogos con Mr.Shue.
En el lado negativo, cosas más personales por mi parte: los que me seguís habitualmente ya sabéis que me encanta llorar viendo historias de ficción, pero este episodio era tan real que por momentos me causaba hasta pudor, el mismo que muchas veces me provoca ver a ciertas personas en los informativos hablando de seres queridos que acaban de perder o están buscando, un dolor que no debería estar plasmado en una cámara de televisión, que me hace sentir intromisión. En esta ocasión, al mismo tiempo que me alegraba de ver la manera en la que habían decidido homenajear a Finn, no podía evitar tener este sentimiento de estar colándome en la vida de otras personas que, guiones aparte, realmente estaban sufriendo esa pérdida.
En cuanto a la trama de este episodio, no es más que una sucesión de canciones con mensaje y de ejemplos de cómo afrontan las personas una muerte inesperada como esta: tenemos el destructivo, el que que se arrepiente de no haber contado cómo se sentía, quién solo puede llorar, quién no sabe cómo seguir adelante, el fuerte, el que mantiene al grupo unido a costa de no afrontar su propio dolor, sentimientos tan reales como la propia vida, algunos recientemente comentados en nuestra televisión nacional, con padres de hijos únicos que no saben si siguen siendo padres cuando han perdido a su único hijo, con familiares que se alegran de haber disfrutado de la posibilidad de compartir esos años de vida con alguien maravilloso…
Verdaderamente, una vez tomada la decisión de que iba a afrontarse un episodio así, creo que Ryan Murphy ha hecho un excelente trabajo.
