Este fin de semana, Informe Semanal cumplía 40 años, convirtiéndose así en el segundo programa de sus características más longevo del mundo después del 60 minutes norteamericano.
Para conmemorar este cumpleaños, el programa y los informativos de la cadena han dado un repaso a algunos de los reportajes más importantes que se han podido ver cada sábado en el programa desde aquel 31 de marzo de 1973 en que aparecía por primera vez en la pantalla de TVE.
Pese a su estabilidad en la parrilla y al prestigio que tiene el programa, pese a las palabras de admiración que ha despertado en todos estos años y las loas recibidas a lo largo de esta semana, no podemos pasar por alto la verdadera realidad: Informe Semanal es un gran programa informativo, no exento de polémicas, un programa informativo que no funciona.
Afortunadamente para sus seguidores y para la gente que lo hace, afortunadamente también para los estudiantes de periodismo, se emite en una cadena pública y la audiencia no es prioritaria para mantenerlo en antena. De formar parte de la parrilla de un canal privado, hace tiempo que habría desaparecido o se mantendría en emisión únicamente para construir marca. En el mes de marzo, su share ha rondado el 6-8% con una media de poco más de 1,300,000 espectadores, varios puntos por debajo de las otras dos opciones informativas que ofrece la competencia a esa misma hora en un formato mucho más barato, menos riguroso y más adaptado a los gustos modernos de la audiencia.
Porque el «problema» es precisamente ese: el gusto de la audiencia, parte de ese círculo vicioso audiencia-gustos dudosos-programas cuestionados que lleva a las parrillas a ofrecer unos formatos periodísticos poco o nada objetivos, basados en la polémica, el encontronazo constante y la demagogia. Menos periodismo, más espectáculo. Todos querríamos más Informe Semanal pero tenemos El gran debate, La Sexta Noche, Salvados, incluso Ana Pastor es espectáculo cuando discute con sus invitados, les insiste y les regaña por no responder a sus preguntas. Todos sabemos quién es Jordi González y empezamos a familiarizarnos con Iñaki Lopez, pero pocos reconocería a Olga Lambea, la actual presentadora de Informe Semanal, que nunca tendrá la popularidad que en su momento tuvieron Mari Carmen García Vela o Rosa María Mateo.
Es bueno que exista un programa como Informe Semanal, que se aspire a producir cosas como esa, que el periodismo tenga algún referente clásico, uno que imitar o del que aprender para evolucionar. De la absurda polémica por el cambio de sintonía, mejor no hablar ¡para una cosa moderna que hacen en TVE!
Entrada publicada originalmente en Generación Young
¿Y pedir un Adam Curtis español ya sería demasiado? 😀