Cinco y media de la tarde, pongo Cuatro para que no se me olvide el estreno de Te vas a enterar, el nuevo programa de actualidad de la cadena. Lo primero que me llama la atención es que termina un episodio de Castle cuando solo quedan 25 minutos para la hora anunciada del estreno, miro el piloto de Digital Plus y veo que la hora de comienzo del programa son las 18:15. Tiene sentido si está empezando un nuevo episodio de Castle, aunque a poca publi que pongan se irá aún más largo (finalmente empezaría a las 18:20). No logro comprender que estos estrenos no entren a la hora prevista ni siquiera el primer día ¿tan difícil es anunciar los programas a su hora cuando no se ven afectados por competiciones deportivas o programas informativos imprevisibles? El ridículo es mayúsculo cuando a las 17:59, con el episodio de Castle lejos de haber terminado, se emite una promo del programa con las 18:00 como horario de emisión.
Segunda cosa que no me gusta antes de empezar el programa, salen los presentadores en una promo-conexión desde la redacción invitando a los espectadores a participar enviando sus sugerencias, pueden hacerlo a un número de teléfono o escribiendo un correo electrónico a un mail de la productora ¿de la productora? ¿desde cuando la televisión es tan transparente? Desde el punto de vista de quienes escribimos sobre televisión, es interesante conocer quienes hacen los programas, qué relaciones existen entre productoras y cadenas y reconocer el estilo de cada uno después de ver varios de sus productos, pero entiendo que, de cara al branding de la cadena, esto debería ser absolutamente transparente. Los productos de Cuatro deben ser de Cuatro, los de Antena 3 de Antena 3 y así con cada una de las cadenas, que deben construir su personalidad por medio de sus programas, independientemente de quién los produzca. Se me escapan los motivos de algo así.
Pero vamos al grano, que el programa ya ha empezado. No entiendo la intención, no termino de ver si es un programa de humor, un programa de información serio o una mezcla de ambas cosas para facilitar que las cosas serias traspasen la pantalla de forma ligera. Que uno de los presentadores, Jesús Gallego, se parezca una barbaridad a Javier Capitán, hace que no pueda evitar recordar El Informal ¿lograrán llegar a parecerse a aquel de alguna manera? ¡Ay, la morriña!
A diferencia de aquel ya mítico formato, en los tiempos en los que casi no había internet, Te vas a enterar recurre a la webcam para hacer conexiones con distintos expertos en algunos temas, un recurso muy moderno pero que da unos resultados televisivos realmente malos. Ya lo comenté en su momento con el programa de La2, La Nube, creo que este recurso no debería instalarse en los programas, por mucho que ya nos hayamos acostumbrado a ver vídeos de YouTube o grabaciones hechas con móviles.
Una cosa muy buena: estamos ante el primer programa y los presentadores muestran soltura, naturalidad y ritmo, tanto los principales conductores del programa como los distintos reporteros que van dando paso a vídeos y secciones. O son estupendos, o han ensayado mucho, o ambas cosas. Un dato para felicitarse, no tan habitual como debería.
Una cosa no tan buena: denuncias solo para un lado de la política. Ministros del PP y sus dietas de alojamiento, escándalo en el ayuntamiento de Torrevieja (del PP), derroche en un mamotreto del ayuntamiento de Cádiz (del PP), Alcaldesa (del PP) que expulsa a un vecino por grabar el pleno, diputado del PP que enchufa a su mujer en el ayuntamiento de Calatayud, Policía Nacional (dependiente del gobierno del PP) sobrepasándose en sus atribuciones en un desalojo en Sevilla, los 255 coches oficiales de Ana Botella (del PP), el coche de Jeque del alcalde de Sevilla (del PP) compensado con su colega de partido, el alcalde de La Coruña, que va andando a trabajar.
Pero, peor que eso, alguna de las noticias tienen un mes de antigüedad o más, como esos vídeos de YouTube que nos ponen en los informativos cuando hace ya semanas que los hemos visto. Si se vende desde el mismo título del programa, que se trata de poner al día a los espectadores sobre aquellos temas que no deben perderse, pecan un poco de mostrar temas trilllados o pasados de fecha cuando, desgraciadamente, en este país no nos faltan escándalos, escandalitos y escandalazos a diario y de todos los partidos, que va a parecer que los demás son buenos.
Y luego esa manía de salir a la calle a pedir información ¿realmente nos importa lo que dice la gente de la calle? A mí la verdad es que nada de nada, pero igual es que soy rara.
Resumiendo: compro todo el armazón, su estructura, sus presentadores, su ritmo (movimientos de cámara Lazarov y todo), el decorado, la naturalidad general, todos están muy bien. Sin embargo, no me interesa nada el contenido general y me sobra la mitad de la duración del programa.
Una de las cosas que más echo de menos de El Informal, es que hablaban de política, pero sin ser demasiado partidistas y hacían humor de todo sin la mala baba y resquemor de otros que no quiero mencionar. No es que le tenga especial cariño a un partido, pero me molesta cuando me intentan lavar el cerebro.