Mucho se está hablando de censura televisiva estos días, desde el mediático recorte de la entrevista de Quintero a García, al cambio de guión solicitado por Telecinco a la productora de Aida por unas escenas en las que esta se liaba con un sacerdote.
Pero no estamos solos en esto, en EE.UU. la polémica ha llegado de la mano del bruto de Jack Bauer, al que parece que van pedir que se relaje un poquito. Al principio parecía una simple queja de algunos colectivos, pero la bola ha ido creciendo y ya se empieza a considerar el caso como el nuevo Janet Jackson, paradigma de la censura televisiva estadounidense de los últimos tiempos.
Como bien concluyen en este artículo de la revista TIME, independientemente de las cuestiones políticas y morales que se puedan esconder tras las censuras a diversos comportamientos sexuales o violentos aparecidos en televisión, lo importante es tener claro que a determinadas edades hay cosas que no se pueden ver, y definitivamente 24 es una de ellas… los demás deberíamos poder seguir disfrutando de ella tal cual siempre ha sido.
O incluso que no vean las noticias…claro que no es lo preferible para ciertas
edades mas impresionables pero lo que aparece en 24 lamentablemente ocurre. Y la labor tanto de los que emiten como de los que lo reciben es con constancia explicar a los que aun no distinguen cual es el mejor o peor comportamiento sensibilizarlos de que eso sucede y como pueden ellos con sus actos evitarlo.No ocultarlo porque sigue estando ahi.Y a los que tienen mas consciencia refrescarles que peligros conllevan las conductas de algunos
sin favoritismos sectarismos ni visiones maniqueas.