Leo con sorpresa que en Telecinco están preocupados por el próximo regreso de Camera Café y la necesidad de que este se encuentre a la altura de su sustituto veraniego: Escenas de Matrimonio.
La serie de José Luis Moreno que reproducía las famosas Matrimoniadas de Noche de Fiesta era, a priori, una castaña que jamás hubiéramos pensado iba a tener éxito, no solo porque el perfil de Telecinco no tiene nada que ver con el de La Primera y parecía difícil que se fuera a trasladar la audiencia de un canal a otro, sino además porque, de entrada, el programa en sí era bastante ¿como lo digo? lamentable. Los guiones con chistes tan manidos, con personajes tan antipáticos y con situaciones tan maleducadas que no consigo encontrarles la gracia. Sin embargo, la serie ha conseguido recibir el apoyo del público y ha conseguido mantener la audiencia por encima del 20% y hasta un 28’8% , datos fantásticos para un producto como este que tenía un importante vacío que cubrir.
Pese a ello, que alguien en Telecinco pueda estar preocupado porque el regreso de Camera Café no alcance los datos de antes parece exagerado, pues la serie de Guridi no ha dejado de recibir el apoyo del público en ningún momento pese a sus frecuentes repeticiones y el hecho de que Escenas de Matrimonio haya mantenido la audiencia casi inamovible demuestra sobre todo una cosa: que somos animales de costumbres y que ese rato tonto que hay entre el final del informativo de Telecinco y el inicio de su serie de Prime Time hay mucha gente que no se molesta en rellenarlo con zapping (máxime cuando lo que encuentras a esa hora en otras cadenas es la información deportiva de otros informativos y luego publicidad, mucha publicidad).
Supongo que también habrá influido el hecho de que en verano la gente más joven está en la calle o de vacaciones, con lo que el público objetivo que se queda en casa si es más target de este tipo de programa, todo un acierto bien visto por los responsables de Telecinco. Precisamente por eso me extraña pensar que ahora puedan estar preocupados por la vuelta de los chicos de la oficina, a sabiendas de que todos volvemos a nuestra rutina en los próximos días y lo último que queremos ver es a tres parejas amargadas con problemas tan exagerados que es prácticamente imposible identificarse con ninguno. En cambio Camera Café, aun siendo igualmente exagerado, consigue que encontremos personajes y situaciones que todos reconocemos y eso posiblemente sea parte de su éxito.
Por cierto, hace unos días la revista Variety publicaba un artículo dedicado a Escenas de Matrimonio en el que analizaba el éxito de la serie, atónitos por el éxito de un producto tan retrogrado como este.
ACTUALIZACION: Consultor Anónimo trata el tema en Vaya Tele comparandolo con el clásico dilema futbolístico del suplente que da un excelente resultado y no sabemos qué hacer con él cuando el titular se ha recuperado. En este caso me atrevería a decir que el suplente ha estado jugando la pretemporada pero que para la Champions, casi mejor ir a lo seguro 😉
http://www.vayatele.com/2007/08/30-escenas-de-matrimonio-vs-camer…
Creo que ambos formatos comparten que son comedia ligera basada en sketches cortos. Y que tratan temas «identificables». Por lo tanto, no creo que haya esa brecha entre los «inteligentes» y los «zafios». El grueso de la audiencia creo que es compartida.