Muy interesante esta reflexión sobre cómo algunos programas de televisión destinados originalmente a denunciar un problema o llamar la atención sobre las dificultades vitales que puede producir una mala cabeza, terminan por tener el efecto contrario en su público objetivo.

El ejemplo que ilustra el artículo es el del programa de televisión de MTV 16 and pregnant, que ya tuvimos ocasión de ver en España, en concreto en Cuatro, dentro de la serie de programas de coaching que producen para emitir los viernes noche. Al parecer, las protagonistas norteamericanas de este reality en el que se muestra lo difícil que es sacar adelante un bebé cuando aún se es casi una niña, se están convirtiendo en material de portada de revistas y no es infrecuente verlas compartiendo espacio con actrices de hollywood o las más recientes princesas en la sección de cotilleos en couché del supermercado.

Si el programa se emitiera en un canal dedicado a la información sobre salud, por ejemplo, la edición de imágenes y las situaciones que se muestran irían decididamente encaminadas a mostrar los sobresaltos que un baño demasiado caliente, una caida desafortunada o un bebé que no come provocan en sus madres pero, al emitirse en MTV, se hace más hincapié en las difíciles relaciones de pareja de las recién paridas con sus igualmente inmaduras parejas, en sus ganas de fiesta y confidencias con amigas y, en definitiva, en todo aquello que unas chicas de dieciseis años quieren hacer en su tiempo libre o cuando encienden el televisor para ver su canal juvenil favorito.

Y así es como se desarrolla la historia y un programa destinado a incrementar las precauciones de las más jóvenes, se convierte en un atractivo creador de famosas sin mucha cabeza, demostrando como la edición de unas mismas imágenes puede cambiar por completo el sentido de cualquier pieza audiovisual. Si a esto le sumamos la reciente encuesta hecha entre los jóvenes americanos, en la que afirmaban que preferían ser famosos a inteligentes, tenemos todos los ingredientes para estar emitiendo todo lo contrario a lo que una vez quisimos hacer.