¿Debería irse el programa entero también? Esa es la pregunta que la despedida del presentador ha suscitado en muchos de sus seguidores, y más aún en los que ya no son seguidores pero lo fueron en algún momento. La cuestión es que este programa ha tenido tantos reveses que nos hacían augurar su final para luego renovarse y mantenerse, que no parece que esta vaya a ser la puñalada definitiva.

Teniendo en cuenta que durante estos cinco años en antena han sido varias las ocasiones en que sus presentadores se han ido de vacaciones sin mayores sobresaltos en las audiencias, la lógica dice que esto no debería suponer un problema, pero quizá sí una llamada de atención sobre la posibilidad de un cierre definitivo. Si hasta los presentadores están cansados, puede que sea el momento.

El programa final de Ángel no ha tenido mayores sorpresas, porque no me negaréis que más de uno ha pensado que todo esto era una broma más de las del programa, sospecha que rápidamente apartábamos de nuestra imaginación al ver las inevitables lágrimas de Patricia Conde en su cancioncilla de despedida con Berta Collado.

La imitación de Mercedes Milá, que supongo que es un personaje habitual ya pero que yo nunca había visto, me ha parecido genial. Como toda buena parodia de personaje, debe resaltar lo más exagerado de cada uno y desde luego, si algo tiene la Milá últimamente, es una impresionante capacidad para reirse de todo, de ella misma la primera, como una auténtica cabaretera. Por no hablar de las constantes referencias a la salida de tono de Juanjo Puigcorbé, que se merece todo el pitorreo que los medios tengan a bien hacer con ello.

Como novedad, el programa de hoy ha tenido participación directa de la audiencia por medio de SMS, en los que poder despedirse de Ángel y, como ocurre siempre con estos mensajes y bien que se han reido en otros programas de ello, no faltaron los hoygan ¡lástima que no los comentaran sobre la marcha! Para un programa con gran actividad tuitera, es una pena que no hayan optado por utilizar este medio para las despedidas, estoy segura de que hubiera dado mucho más juego, dentro y fuera de la pantalla.

La sorpresa de Joaquín Sabina entrando en directo por teléfono ha estado muy bien, porque no hay mejor cosa en televisión que conseguir que el presentador se sorprenda y se emocione. Y la recreación de La Caja, que ha debido ser de lo poco no guionizado, también, muy propia para este tipo de programa despedida.

He ido escribiendo el post a medida que veía el programa y veo ahora que la despedida de Ángel ha sido precisamente lo que mencionaba al principio de la entrada, los malos augurios para el programa tras la marcha del Analista de medios más famoso de la televisión, una despedida muy acertada en la opinión pero muy fría. Entiendo que hayan querido huir de sentimentalismos pero es que a mí lo que me pone es un buen drama.

Por cierto, lo que se escuchaba en el vídeo final ¿era un tema musical de Lost o es que escucho sus acordes por todas partes?