Muy interesante este resúmen que hace Eva del artículo Series Españolas Vs. Series Americanas que aparece en la revista Kane.
La reflexión que me parece más destacable de todas es aquella en la que se dice que los guionistas españoles, al intentar llegar a todos los miembros de la población, se ven obligados a incluir en sus series a representantes de todos los colectivos y generaciones, lo que hace que todas las series se parezcan mucho entre si. Algo que no ocurre en EE.UU. donde, el tamaño inmenso de la población, hace que unos ratings más pequeños sigan suponiendo una importante masa de público.
Sobre la duración de los episodios, estoy de acuerdo en que estirar las tramas hasta conseguir episodios de dos horas en lugar de una es tedioso para los guionistas y contraproducente para el resultado final, pero también es cierto que es mucho más barato que hacer o comprar dos series que cubran el mismo espacio en emisión.
Lo que no comparto y es una obsesión por parte de muchos, especialmente las mentes pensantes de Globomedia, es el tema del horario de comienzo del Prime Time. En EE.UU. comienza a las 20:00 y normalmente se emiten un par de series de 1hora de duración y a las 22:00 el informativo. Aquí sin embargo, el Prime Time da comienzo a las 22:00 y en consecuencia termina mucho más tarde. Esto no puede ser una razón para el escaso éxito de ninguna serie, dado que los ritmos de vida del ciudadano español nada tienen que ver con los del americano, que sale de trabajar mucho más temprano, cena mucho más temprano y a las 20:30 ya hace tiempo que llegó a casa y organizó todas sus tareas.
Si alguna cadena española optara por adelantar sus series de éxito a las 20:00h, tendría que empezar por cambiar las costumbres de empleados, directivos y hasta de las familias que tienen a sus hijos haciendo actividades extraescolares de todo tipo hasta bien entrada la tarde… aunque si se ponen en ello tienen mi apoyo al 100%
Las 20:00 quizá fuera demasiado pronto pero las 21:00-21:30 (como hacen la FOX o AXN) me parecen unos horarios más que razonables.