Acostumbrados como estamos a que los canales de televisión vayan lanzando sus novedades con cuentagotas y con el aviso mínimo requerido por la ley, tratando de despistar a la competencia y provocando no pocos quebraderos de cabeza, sorprendía ayer el anuncio por parte de Antena 3 de cómo será su estrategia de lanzamiento para este mes de octubre, el primero que aborda de lleno la nueva temporada.
Como si de una serie de Netflix se tratara, parece que Atresmedia ha decidido darlo todo de una sola vez, atiborrar al espectador de estrenos, con contenidos nuevos cada día de la semana, todos los días de la semana, sin preocuparse por la competencia, sin esperar a ver qué anuncian estos en qué momento, sin miedo y casi sin red. Así, la parrilla de Antena 3 de la próxima semana suma a la ya estrenada nueva temporada de Mar de Plástico, los estrenos de El amor está en el aire los martes, la temporada final de Velvet los jueves y la incombustible Tu cara me suena los viernes.
Es una apuesta arriesgada, pero puede salirles muy bien, especialmente a la vista de lo floja que está resultando la actual edición de Gran Hermano, tanto en su gala de los jueves como en la previa de los martes, principales escollos a superar por cualquier producto que se quisiera enfrentar a este formato, que no parecía tener rival. Sea por la ausencia de Mercedes Milá, por un casting que no ha funcionado o por una serie de decisiones y cambios en el desarrollo del concurso, lo cierto es que este pilar de la programación hace aguas en sus primeras semanas, un problema doble cuando es tu principal apuesta de programación dos días a la semana. Así lo han debido entender en Atresmedia y se han lanzado con todo a superar a una Mediaset que mes tras mes consigue alzarse con el liderazgo total de audiencias.
En estos tiempos en los que parece que los hábitos de consumo han cambiado drásticamente, que la escasez no está de moda, que triunfa el que lo da todo para que el usuario se administre el entretenimiento como quiera y no como le obligan, llega Antena 3 a cambiar el paso tradicional de las cadenas en abierto. No es una gran novedad a nivel general, pues esto de saber qué y cuando se estrenan los programas es muy habitual en el resto del mundo, especialmente en EE.UU., pero sí es una novedad para el tradicionalmente oscuro mercado español, donde no sabemos por adelantado ni cuando se estrenan los programas, ni cuando terminarán. Un cambio a mejor, para variar.
Será interesante comprobar si la estrategia funciona y cómo se revuelven en Mediaset para contrarrestarla.