Cuando falleció Roberto Cairo, el actor que daba vida a Desi en Cuéntame, los guionistas se enfrentaron a un reto inesperado, el de hacer desaparecer el personaje con una trama digna y solvente. Los años que algunos personajes de televisión pasan interpretando a sus personajes hacen que sean muchos los espectadores fieles que se identifiquen con ellos, hasta el punto de considerarlos de su propia familia, queridos amigos como poco y es por ello que se ofenden con cualquier cosa que les pase que consideren impropia de ellos, que no se ajuste a lo que uno espera del personaje.
Esta sensación de cercanía, de conocer al personaje como un auténtico amigo, es lo que ha provocado que la emisión del último episodio de Cuéntame, en el que Desi desaparece dejando únicamente una carta de despedida en la que informa de que se ha enamorado de otra mujer y huye con ella al pueblo, haya provocado gran desazón entre sus espectadores.
Que un personaje muy querido haga de repente algo reprochable, impropio de su carácter es algo a menudo necesario en una ficción, algo que puede hacerse para remover un poco los cimientos de una serie que se puede llegar a convertir en previsible. Así, los matrimonios perfectos pueden caer en la infidelidad, los rectos protagonistas pueden cometer algún delito y hasta los asesinos más despiadados demostrar que tienen un corazoncito. Todo esto es admisible, siempre y cuando haya posibilidad de redención, siempre que sepamos que puede ser una crisis pasajera pero que el viaje al que se enfrenta el personaje acabará, irremisiblemente, en una vuelta a su verdadero ser, el que nos conquistó, el que nos hizo apreciarle o, también, en ocasiones despreciarle.
Distinto es cuando sabemos que ese cambio de personalidad no tendrá vuelta atrás, un cambio que no se corresponde con lo que esperamos del personaje, sobre todo si es un cambio a peor, un giro que convierte al personaje en alguien ruin y no nos deja posibilidad de retroceso, porque el actor simplemente ha muerto (podría ser que solo se hubiera marchado de la serie, pero eso siempre nos dejaría abierta la puerta al regreso heróico). Definitivamente, un actor querido, uno que interpreta a un personaje apreciado, tal como dicen los seguidores de Cuéntame, debería salir de la serie con la cabeza muy alta, como corresponde a quién ha dado años de su vida por un papel. No es de extrañar que los seguidores de Cuéntame se hayan mostrado tan disgustados con la elección de esta salida. Y no solo por la mala imagen que queda de él, también por la poca dedicación que parecen haber puesto en encontrar una salida digna.
Ciertamente, suena extraño, no puedo evitar pensar que exista alguna razón más escondida tras esa carta y ese repentino abandono ¿retomarán la historia de la partida de alguna manera para dejar a Desi en mejor lugar o simplemente han optado por borrarlo de la primera manera que se les ha ocurrido? Lamentablemente, en apenas un par de episodios el malestar habrá desaparecido y ya pocos recordarán la razón por la que se fue… pero hubiera sido bonito que se fuera de otra manera.
ACTUALIZACIÓN (27/02/2015): Pues sí, TVE tenía preparado algo mejor para la despedida de Desi. Así si.
El primer plano del primer episodio de la temporada fue un homenaje, el plano enseñaba la placa de la calle «Calle Doctor Roberto Cairo». Creo que fue un bonito homenaje.
En cuanto a la trama con la que desaparece, me parece un final digno para el personaje, volverlo a matar en la serie sería cruel y el personaje siempre ha sido muy mujeriego. A mí me ha gustado.