OJO SPOILERS (Si no has visto el final de la tercera temporada de Homeland ¡huye!)
Lo primero que tengo que hacer en esta entrada es volver a insistir en lo importante que es marcar bien los spoilers en las entradas sobre finales de series, máxime cuando se refieren a cuestiones irreversibles como la muerte de un protagonista. No, no sirve que me lo digas en el inicio del texto si a continuación vas a poner un titular intermedio en negrita en el que pone «Vida y muerte de Brody», titular por el que indefectiblemente tengo que pasar haciendo scroll si quiero leer tu siguiente entrada. Tampoco me vale que pongas una foto de Brody muerto, porque también he de pasar por ella para avanzar en tu contenido, tanto si lo leo directamente en la web como si lo hago en un lector de feeds. ¿Tan difícil es?Hala, ya me he desahogado.
Y ahora vamos con Homeland, que es lo verdaderamente importante, y cómo esta temporada ha logrado salvarse, gracias a la inesperada desaparición de su personaje protagonista, que en esta tercera entrega de la serie ha pasado penando por apenas la mitad de los episodios, casi haciéndonos agradecer su pérdida.
Y es que esta temporada de Homeland ha sido tremendamente floja, por momentos incoherente y hasta me atrevería a decir que paralizada, como si nadie supiera qué hacer con ella, qué misión darle a los personajes, como salir de el embrollo que supone ser la serie más aclamada durante dos temporadas consecutivas y cómo afrontar ese éxito.
Personalmente, yo no he podido abstraerme de los cotilleos que este verano apuntaban a problemas entre los actores protagonistas, problemas que hacían difícil su relación, tanto en lo personal como en lo profesional y que habrían obligado a cambiar guiones para sacar adelante los episodios con el mínimo daño posible. De ser verídicas estas informaciones, la ausencia de cohesión en la primera parte de la temporada tendría mucho sentido, y mucho delito, pues no se comprende que dos personas no puedan dejar sus problemas a un lado para seguir alimentando una exitosa producción que solo redunda en beneficios para su carrera. Si por el contrario no ha existido ningún problema y la decisión de separar las tramas de uno y otra ha sido creativa, casi sería peor, pues creo que han destrozado una serie que se alimentaba sobre todo de la química entre sus protagonistas y sus decisiones vitales.
Sea por un motivo o por otro, no quedaba más remedio que tomar una decisión tajante y matar a Brody ha sido lo único inteligente que han hecho en toda la temporada, pues estirar más ese chicle no tenía sentido. Y aún con eso, que es dramático y nos podría haber arrancado una lágrima o si acaso un nudo en la garganta, ni el momento del ahorcamiento, ni el de la estrella en la pared han logrado traspasara la pantalla. ¿Por qué? Muy sencillo: si los protagonistas están apartados toda la temporada es muy difícil empatizar con su dolor.
A partir de ahora, el foco está puesto en Carrie y su nuevo puesto de responsabilidad en Estambul. ¿Podrá ella sola llenar el vacío que deja la figura del héroe/terrorista? Me permito dudarlo.
PAra esto..si hubieran matado a Brody al final de la segunda que grande habría sido