Después de ver el piloto de Elementary, me he quedado bastante fría, tánto que realmente no sabía por dónde empezar el post que pensaba dedicarle, como una de las series que podrían haber suscitado mayor interés de este otoño, aunque solo fuera por el que podría ser su principal defecto: ser una vuelta de tuerca más al manido personaje de Sherlock Holmes.
Cuando ya estaba decidida a no escribir del tema, leo este muy acertado post de Ken Levine en el que explica cómo cualquier historia puede convertirse en múltiples cosas distintas, una cosa es la idea, que es una sola, y otra la ejecución de esa idea, que puede dar lugar a diferentes series de distintos géneros. Y eso es lo que ocurre con el personaje de Sherlock Holmes, que cualquier enfoque basado en su personalidad especial y su relación con Watson vale para arrancar una serie, lo importante es cómo sigue.
En este sentido, Elementary está a medio camino entre el clásico Sherlock protagonizado por Benedict Cumberbatch que nos ha conquistado a todos y el más arriesgado House que algunos tardamos en reconocer como representación del famoso detective. En este caso, el elemento principal que pretende sorprender es el de la figura de Watson, que resulta ser una mujer, una Lucy Liu con la que a priori no debería tener tensión sexual alguna, pero que nos sorprende con una declaración de amor inesperada que, al menos a mí, me hace replantearme si alguna vez decidirán tomar ese camino.
Como no podía ser de otra manera, este Sherlock también tiene problemas psicológicos, es histriónico, ve programas de televisión de cinco en cinco, huele las alfombras buscando pistas, se mueve como si algunas de sus conexiones internas se cortocircuitaran de vez en cuando… Además, resulta que es un exalcohólico redimido que bebía por puro aburrimiento, motivo por el cual su padre contrata a Watson, una persona de apoyo que permanezca día y noche con él durante seis semanas para asegurarse de que no recae en ningún tipo de adicción.
El resto es puro procedimental, un caso policíaco a investigar, la inestimable ayuda de Sherlock como asesor de la policía y una resolución inesperada basada en un detonante completamente ajeno al caso, algo que en House llegó a resultar cansino. La relación entre Sherlock y Watson parece hacer click muy pronto y aunque ambos son distantes y guardan heridas del pasado que les han hecho ser como son, parece que precisamente eso será lo que los mantenga unidos y en sintonía, veremos cómo y cuanto.
Hola,
Me podrías aconsejar alguna serie. Me han gustado Los Soprano y The Wire y ahora busco alguna cosa más que sea digna de ver.
Gracias