A este paso y aún sin tener fútbol, creo que voy a empezar a amortizar la suscripción a Digital Plus, porque la televisión en abierto es un desastre la mayor parte de las noches y las cadenas norteamericanas tampoco están dando mucho de sí, lo que afortunadamente me permite ponerme al día con algunas series que llevaba retrasadas, que tampoco está mal como ejercicio teléfilo. Ahí me esperan todavía Episodes, media temporada de The Killing, otro tanto de Missing y hasta Girls, a la que prometí dar una segunda oportunidad. También tenía Nurse Jackie, pero esa la liquidé hace un par de días. La programación en abierto estos días es tan mala, que no sirve ni para tener la tele de acompañamiento mientras se hacen otras cosas y mira que yo me conformo con poco.
El último de los dramas, la reposición en TVE de Ana y los siete y de Curro Jiménez en La2, con el consiguiente desplome de las audiencias de una y el sorprendente interés despertado por la otra. Puedo admitir que repongan Verano Azul, que ya es un clásico. Puedo pasar por alto el refrito del programa de las mañanas. Y hasta agradezco, si es que al final lo han quitado, que no lo sé, que Corazón, Corazón deje descansar a sus guionistas, que son lo más relamido que ha pasado por la televisión en este país (algún día transcribiré algunas de las frases memorables que logran componer cada día). La audiencia es una bendita pero, a este paso, cuando logren recomponer los presupuestos y la planificación de la temporada, nadie va a recordar que merecía la pena pulsar el 1 del mando.
Pero la mala programación no es únicamente fruto de la falta de presupuesto, otras cadenas, como Telecinco, a las que se presupone una buena salud financiera, sorprenden con programas como Todo el mundo es bueno en el que una pandilla de descerebrados que no hacen gracia ni a sus propios familiares, avergüenzan a sus conciudadanos, horrorizados frente al televisor pensando que el futuro de España depende, entre otros, de gente como esa. Afortunadamente y después de haber sufrido el peor varapalo en comentarios tuiteros que recuerdo, el programa ha sido definitivamente cancelado, aumentando la fama de gafe de su presentadora, Pilar Rubio.
Pero no todo es malo en esta viña: en algunas parrillas nocturnas asoman series de producción americana, de mayor o menor calidad, pero muy entretenidas, como la histora de una saga familiar de policías de Nueva York, capitaneada por Tom Selleck en Blue Bloods, la mejor de las recientemente estrenadas aunque Telecinco parezca un espacio poco natural, un procedimental con tintes de cuentos clásicos en Grimm, otro de investigadores con superpoderes en Alphas (lo que saldría de mezclar CSI con Los Protegidos) o Imborrable, la historia de una pelirroja Poppy Montgomery traumatizada por el asesinato de su hermana pero con un don que la convierte en una excelente policía, su incapacidad para olvidar hasta el más mínimo detalle de lo que pasa a su alrededor, todas ellas en Cuatro, que ha tenido una semana muy movidita.
Si lo tuyo son más las series españolas, Antena 3 estrenaba el pasado lunes Pulseras Rojas con un excelente resultado de audiencia, pese a lo dura de la historia que contaba, demostrando que en no pocas ocasiones las historias bien contadas también pueden ser éxitos entre el gran público. Más difícil lo tendrá Juego de Tronos, que se estrenará los martes para competir directamente contra Hay una cosa que te quiero decir, que sigue subiendo semana tras semana, ante la falta evidente de competencia que merezca la pena.
Entre tanta novedad, hoy creo que le voy a dedicar un rato a Dando la nota, que la semana pasada arrasaba en comentarios como reencarnación de aquel Furor que se ha convertido casi en programa de culto de la televisión nacional de los 90. ¡Que Dios me pille confesada!
Yo estoy deseando (y sé que debo ser la única en España) que vuelvan a emitir la enésisisisisíma reposición de ‘Rex, un policía diferente’ (pero la producción de la ORF, o sea: la original). Me da igual que lo hagan en TV3 que en Antena 3 que en Neox que en el canal local de Retuerta del Bullaque: ahí estaré yo para verlo y para grabarlo. Me da igual que esta serie estuviera años emitiéndose en un loop, me da igual haber visto todos los episodios unas 35.000 veces. Me encanta. Asocio el visionado de esta serie con momento de paz y felicidad. No creo que se cumplan mis deseos, pero de ilusión también se vive. En cuanto a la programación de verano, pues sí: una mierda.