Este final de temporada me está resultando algo flojo, con series que intentan dejar alto el nivel de tensión de cara a mantener o incrementar su audiencia en el regreso, aunque no todas lo están consiguiendo y algunos episodios finales podrían parecer más un episodio cualquiera o uno de esos cliffhanger con los que nos castigan antes de los inevitables parones de programación que algunos eventos deportivos o el ajuste del número de episodios al calendario nos regalan.
Por el momento, estos son los finales de temporada que ya he visto y mis sensaciones con ellos. Evidentemente, a partir de este punto hay spoilers de las distintas series mencionadas, así que puedes seguir leyendo sin riesgo, solo si ya los has visto.
Anatomía de Grey: a priori era, como siempre, de los más espectaculares, pues ya sabemos como le gusta a Shonda Rhimes despedirse con algún evento altamente dramático y traumático. Tras arrollar hasta la desfiguración a O’Malley, uno de sus protagonistas más queridos, asesinar cruelmente a medio hospital a manos de un loco con una pistola o matar el amor más tierno, representado en la figura de Denny, este año tocaba tirar un avión lleno de protagonistas.
Las redes sociales se llenaron de spoilers que nos decían que uno de los médicos iba a morir y, pese a que muchos de nosotros pensamos que no podría ser uno de los más representativos, lo cierto es que la muerte de Lexie nos ha dejado a todos con el corazón en un puño y demuestra, entre otras cosas, que Meredith es gafe (pero eso da para otro post). Sin embargo, algo ha pasado que el episodio se ha desinflado por completo después del último aliento de la doctora Grey y hemos llegado al final con muchos frentes abiertos, pero todos sin tensión. Creo que no soy la única que hubiera montado las escenas de otra manera.
Smash: vaya por delante que me sigue gustando mucho esta serie, creo que lo he comentando en un montón de ocasiones ya, y que no me importa que se haya convertido en algo distinto a lo que prometía en un primer momento. Pese a todo, ese final de temporada ha pecado de ausencia de emoción, tan presente en otros momentos de la historia.
Sí, las cartas están barajadas y los personajes han sufrido pérdidas de referentes importantes en su vida que harán que deban empezar a plantearse su futuro de otra manera. Sí, Ivy se ha tomado medio kilo de pastillas pero ¿qué tensión hay en ese plano cuando sabemos que ha de volver la próxima temporada? Hace unas horas circulaba por ahí una información con las ausencias de la próxima temporada, post que no he leído y que iba acompañado de unas cuantas fotografias de personajes, no sé si a título informativo o simplemente decorativo, pues no he querido leer. Sea como sea, estoy segura de que Ivy no se encuentra entre ellos pues, de causar baja en la serie, nos habrían mostrado su muerte y todo el drama alrededor de ella en este episodio final que, tras las idas y venidas de las distintas opciones a protagonizar el estreno del musical, ha flojeado bastante..
Once upon a time: esta serie es un regalo de la televisión. Nunca una premisa tan complicada de ejecutar como la mezcla de cuentos clásicos infantiles con historias del mundo real en la época actual había dado un fruto tan redondo. No es mi serie favorita, pero sí he de reconocer que es la más meritoria de todas las estrenadas en el año y merece un buen puñado de reconocimientos.
En este caso, tras el final de cuento de hadas clásico, con su beso principesco de rigor, la última escena abre la trama para la siguiente temporada que se enfrenta a la dificultad que siempre tienen las segundas temporadas de colmar las expectativas creadas por una primera y redonda entrega, más difícil aún si cabe en esta historia.
Glee: con House había ahorrado mucho pañuelito, pero me ha venido bien, pues en Glee he gastado todos los que tocaban y alguno más. Como veis soy de lágrima facilona y me emociono con lo más tontorrón, pero este final de temporada ha sido tan tierno, que no he podido evitar ver su escena final dos veces seguidas mientras me dejaba llevar por las lágrimas.
Ese actor de amor y generosidad de un Finn que empuja a marchar a Rachael para que pueda cumplir sus sueños, esa típica carrerita por el andén mientras parte el tren y esa llegada a Nueva York (justo en el punto en el yo conocí Nueva York por primera vez) no han podido ser más emocionantes. Si además la escena viene precedida de una sorprendente visita de Gloria Estefan como madre de Santana y un diálogo maravilloso entre ellas dos justo cuando en mi casa nos enfrentamos a una tesitura muy parecida, entenderéis que mi salón pareciera un vídeo de Candy Candy.
Gossip Girl: esta serie me tiene tan aburrida, que nada podría haberme sorprendido. Este episodio final ha sido una vuelta a los comienzos, de esas tan clásicas en muchas series americanas, de esas que vuelven a situar a los personajes en el punto de partida en que los conocimos, pero con todo lo que ya sabemos de ellos: Serena en manos de las drogas, provocando que el novio de Blair le sea infiel con ella, en la misma barra del bar de entonces. Lily casada con un hombre rico y dejando a un lado al que siempre ha sido su gran amor, Rufus. Chuck sin nada más que dinero. Y Blair demostrando una vez más que esta serie no tiene ni pies ni cabeza y que presentan a unos personajes que nunca hacen cosas acordes a su edad, como hacerse cargo de las empresas Waldorf sin haber estudiado previamente, más inverosímil aún cuando, desde el principio, nos han hablado de su brillantez académica. Todo muy poco coherente. Solo pido a la CW que esta que viene sea la última temporada.
How I Met Your Mother: este último episodio ha sido un poco tramposillo, muy en la línea de HIMYM. Todos pensando que nos enfrentábamos a la boda de Barney y luego resulta que no, que era Robin la que estaba a punto de recorrer el camino al altar. Esta jugada nos la han hecho ya más veces y precisamente por ello ya no sorprende. No sé, quizá sea yo que estoy un poco cansada o desencantada de algunas historias y, si bien este último par de episodios han levantado algo el nivel, las historias de Ted y compañía son otras que necesitan un cierre inminente.
Y todavía me quedan por ver los finales de temporada de Revenge, Modern Family, The Big Bang Theory y alguna más, volveré en breve con otro repaso.
Has visto bien el capítulo de HIMYM? No es la boda de Robin en vez de la de Barney, es que se casan el uno con el otro. La duda era saber con quien se casaba Barbeta, creo que eso lo habían dejado bastante claro, no en ese capítulo sino en los anteriores . El de House no está mal, pero es muy tramposo, el supuesto final no se sostiene(no voy a hacer spoilers) la ideas/actitudes del principio y el final no cuadran.