Parece mentira, con lo monísimo que era Jorge Sanz de pequeñito y lo que ha perdido con los años. Si, soy como esa señora de la primera fila que tanto molesta al actor y es que debe ser muy duro haber sido tanto en el cine español para ahora estar en las últimas, casi desaparecido del panorama y con serios problemas económicos para llegar a fin de mes, cumplir con tus obligaciones como padre o sacar proyectos adelante con tu empresa.
Eso es lo que muestra esta serie de seis episodios en la que se mezcla realidad y ficción de forma entretenida y con mucho sentido del humor y autocrítica. Jorge Sanz se interpreta a si mismo en su búsqueda de trabajo, con toques evidentes de ficción, diálogos preparados y un trasfondo de realidad que podría aplicarse a cualquiera de los actores que en algún momento han sido algo en este mundo y que, mientras tienen éxito, parecen estar en un nivel superior. En este caso, la caida es aún peor, convirtiendo a Sanz en un indeseable desgraciado.
La serie está llena de guiños al espectador, desde Jorge Sanz diciendo que nunca haría televisión, salvo que fuera una cosa muy especial, críticas o halagos a otros profesionales del sector, hasta verle haciendo deporte con una camiseta de El Inquilino, la última constancia que tengo yo de Jorge Sanz en activo. Esto acompañado de la primera escena de cada episodio, que remite a momentos clave de la carrera de Sanz, escenas que todos recordamos y que ubican al personaje para que no olvidemos que forma parte de la historia reciente del cine en nuestro país.
La producción es algo lenta, aunque queda mejor decir pausada, los personajes que rodean a Sanz son estupendos, las situaciones que se muestran en ocasiones de una hilaridad contenida, en otras algo vacías, como si nos quisieran transmitir la soledad en la que se encuentra el protagonista a partir de escenas donde no hay nadie más que los protagonistas de la propia historia. La música también ayuda, triste, melancólica, me recuerda a algunas de las músicas de series de los 80, tipo Anillos de Oro. La sensación general que transmite es muy buena, o mejor dicho, es muy triste pero ¿acaso no se trata de eso?.
¿Qué fué de Jorge Sanz? se estrena en Canal + el 12 de noviembre.
jcvd