Como era de esperar, la emisión del programa Dejadnos Solos en Telecinco, ha desatado las protestas de varios colectivos que piden su eliminación inmediata de la parrilla, entre ellos la Generalitat de Cataluña, que considera que se atenta contra el derecho al honor y la propia imagen de los más pequeños.
Llama la atención que sea precisamente con este programa cuando las administraciones se planteen que hay padres que utilizan a los niños en su propio beneficio, sin importarles su desarrollo como personas, que falten al colegio repetidamente o cuales son sus verdaderos deseos relacionados con la televisión o el show business. Y es que son muchos los programas de televisión que utilizan niños, algunos de ellos programas con mejor imagen que este Dejadnos Solos, y que nunca son criticados por el uso de los pequeños. Incluso la publicidad en la que se usan menores lleva detrás horas y horas de casting y nadie parece protestar por ello.
Sin duda es muy complicado decidir dónde se pone el límite en estos casos, dado que los niños pequeños no tienen formada una opinión clara sobre a donde quieren dirigir su futuro profesional y seguramente algunos de ellos estén encantados con ser actores y lo seguirán siendo de mayores, mientras que muchos otros preferirían estar jugando al fútbol en su colegio y no volverán a pasar por un plató cuando sean libres para decidir.
Pero ¿cómo se regula esto?. La primera idea que viene a la mente es la de prohibir la aparición de niños en televisión en cualquiera de sus modalidades, pero esto daría lugar a una televisión completamente irreal, sin niños en las tramas de las series, sin usuarios en los anuncios de productos infantiles o cuestiones tan impensables como la desparición de los niños de San Ildefonso en el sorteo de lotería de Navidad, como de hecho ya ocurriría con la nueva ley audiovisual aún sin aprobar, por retransmitirse en horario de protección infantil.
Espinoso tema de muy difícil solución que sólo puede sacarse adelante con la máxima responsabilidad por parte de los padres. De momento, respecto a Dejadnos Solos, los pésimos resultados de audiencia de su primera entrega ya lo han retirado de la parrilla, al menos hasta el regreso de las vacaciones.
No sabría explicar por qué, pero veo distinto el tema de las series y películas (ficción) que la publicidad y los sorteos de lotería.
Será porque a mí sí que me daría rabia ver series sin niños y me alegraría no verlos en publicidad (y mucho). Lo del sorteo me la trae más al pairo.
En cualquier caso tampoco veo mucho peor una tv sin niños que tal y como lo tenemos ahora. Y no me refiero a la calidad, que también, pero sin ser ninguna de las dos soluciones perfectas, por lo menos la tv sin niños haría menos daño.
Saludos.