Ayer Telecinco emitió la primera entrega de la miniserie que ha grabado sobre la vida de Paquirri, con motivo del 25 Aniversario de su muerte y, mucho me temo, para seguir alimentando su programación amarilla en torno a las figuras del mundo del corazón, pese a que sus protagonistas principales estén ya muertos o defenestrados.
No podemos negar que las miniseries se han puesto de moda: la gente las sigue, tienen bastante calidad técnica, para ser algo más parecido a una TV Movie que a una serie tradicional, y han encontrado un filón en los hechos delictivos más sonados de la actualidad española o la vida de los famosos. Por si la propia temática de estas miniseries no fuera suficiente atractivo para el espectador, se buscan nombres conocidos para dirigirlas o intérpretes populares para protagonizarlas, con cuidado de no perder el verdadero sentido de la historia por poner una cara bonita o muy reconocida.
El caso de ayer no fue distinto y la audiencia ha seguido la pauta prevista, pese a que Antena 3 contraprogramó con el estreno de la nueva temporada de Física o Química, una lucha sin mucho sentido al ser dos programas dirigidos a targets completamente distintos y que seguro derivaron a muchos jóvenes a una televisión secundaria de la casa, algo que probablemente ya hagan a diario. Paquirri ganó la noche con un 18% de share, frente al 17,5% de FOQ.
Yo ya rondo más la edad de quienes ven Paquirri en lugar de una serie de adolescentes (aunque sea capaz de ver Gossip Girl, 90210,Greek y Glee en una misma tarde) así que me senté a ver qué habían hecho con «el mito». Lo más destacable de la serie son sin duda sus caracterizaciones:. aún habiendo recurrido a algunos actores conocidos, el parecido con los auténticos protagonistas de la historia es notable y consigue que el espectador no olvide que se trata de una historia «basada en hechos reales». Al mismo tiempo, la fotografía tiene momentos brillantes, escenas ambientadas en lugares que parecen sacados de una sesión de fotografía publicitaria, realmente bellos. Sin embargo, la narración es lenta, aburrida, sin sobresaltos, mal hilada y verdaderamente, no cuenta nada.
La historia de un torero como Paquirri es mucho más, supongo, que la historia de un hombre y una mujer que se enamoran y no logran encajar sus estilos de vida. De hecho, tras finalizar la emisión de esta primera parte de la serie, se emitió un reportaje sobre la historia del torero, su esposa y sus familias que, en los diez minutos escasos que vi, era mucho más interesante que toda la hora y media que nos habían ofrecido antes.
La semana que viene se emite la segunda parte de esta historia y supongo que será muy parecida. La curiosidad por seguir viendo los parecidos razonables seguramente me lleve a verla también, y conmigo una importante parte de la audiencia como ocurrió ayer pero, una producción televisiva no debería basar su éxito en lo mucho que se parecen los actores a las personas reales a las que interpretan, no es suficiente aunque debamos dar la enhorabuena a sus responsables.
Alguien podría decirme cuál es el tema principal de la miniserie de paquirri? ya lo había escuchado en aquí hay tomate pero soy incapaz de dar con él. Gracias