La experiencia del miércoles por la noche viendo el último episodio de Cómo conocí a vuestra madre fue realmente divertida, primero por el episodio en sí, que siempre es un placer, pero además porque descubrí que, al mismo tiempo que yo, había al menos dos personas conocidas más viéndolo y comentándolo, como si nos encontráramos ante un episodio cualquiera emitido en televisión tradicional. Parece un dato insignificante, pero en realidad supone un importante cambio en los hábitos de consumo que, sin embargo, reproducen las formas tradicionales de ver la televisión, porque al fin y al cabo, esto de ver series es un placer que todos queremos compartir.
ATENCION: A PARTIR DE AQUI SPOILER DEL EPISODIO S02E14.
Al margen del dato sociológico, quería comentar este episodio por la ingeniosa forma que han tenido los sus creadores de incorporar una más que incipiente barriguita de su protagonista en el desarrollo del episodio. Como muchos ya sabréis, Alyson Hannigan está embarazada, pero su estado no será incorporado a la trama de la serie, así que uno empieza a pensar que pronto empezaremos a verla siempre tras una mesa, en un plano corto y sin duda con ropas muy flojitas. De hecho, en el episodio de ayer ya se veía como su forma de vestir había cambiado notablemente, aunque su cara ya mostraba indisimulables signos de algún kilito de más.
Pero, como en EE.UU. son especialistas en hacer guiños al espectador, una escena del episodio nos cuenta la historia de cómo Lily gana un concurso de comer perritos calientes y nos muestra a la protagonista con la tripa supuestamente hinchada por la ingesta de más de 30 salchichas. Una mera anécdota que, sin embargo, nos recuerda cómo se puede hacer cómplice al espectador de una forma sencilla que lo conquiste aun más.
Por si os lo preguntáis al ver la foto, sí, también Cobie Smulders está embarazada.
Muy bueno el capítulo. Que les darán en esta serie para que las dos chica estén embarazadas al mismo tiempo. ¿Se resentirá la audiencia en su ausencia?