Ya no me gustó la primera temporada de Ajuste de cuentas que, como comenté en su momento, no aportaba soluciones a los problemas genéricos de las familias, sino soluciones muy concretas a problemas muy específicos de la familia seleccionada para cada episodio y que, finalmente, acababa por ofrecer un reality en lugar de un coaching.
De esta temporada no había visto ninguna de las entregas del programa hasta la pasada semana, en que me dispuse a comprobar si el formtao había variado algo o seguía por los mismos derroteros. Lamentablemente la respuesta fue la segunda y, pese a que el programa puede enganchar fácilmente al espectador a base de ofrecer conflictos entre personas, algo cuyo funcionamiento en televisión está sobradamente probado, dista mucho de parecerse a los otros programas de este género que podemos ver en la misma cadena, como Supernanny o incluso El encantador de perros. Eso por no hablar de la asesora financiera que aparecía en el programa, tan pintada y sobreactuada que, de ser yo la directora del mismo, no le hubiera permitido participar por el bien de la credibilidad de su intervención.
Pero lo que más me sorprendió del programa fue un inquietante mensaje que aparecía al pie de la pantalla cada cierto tiempo y en el que se instaba a la gente a llamar a un 806 en caso de necesitar ayuda con sus problemas económicos. Desconozco a qué tipo de empresa se llama desde ese número y la información aportada en pantalla no arroja ninguna respuesta, simplemente invita a llamar a quienes quieran ser ayudados como los protagonistas del programa. A un 806, teléfono de tarificación extra y muy poco apropiado para familias en apuros. Como digo, desconozco cual es la finalidad de ofertar este número de telefono o quién está al otro lado de la pantalla, si es la propia cadena recabando posibles protagonistas, un negocio paralelo de la productora del programa o una empresa que se publicita por esta vía (no recuerdo si salía el texto correspondiente alertando de que se trata de publicidad). En cualquier caso, muy inapropiado para el tema que se trata, o al menos eso me parece a mí.
¡Que vuelva Supernnany, que esa sí que lo hace bien!
Es cierto que el programa ajuste de cuentas de la cadena cuatro en cierta medida es un reality ya que se muestran los conflictos de las personas que reciben la ayuda financiera, pero también es cierto que todo problema financiero surgue a raiz de problemas psicológicos que en muchas ocasiones terminan en conflictos familiares o matrimoniales.
En mi opinión, es inebitable que no vayan emparejados problemas financieros con personales-psicológicos y pienso que es bueno que se muestren ambos para que todo el mundo lo aprecie y se conciencie de que el mal ahorro o financiación no solo perjudica al bolsillo sino a nuestras relaciones personales (familiares, matrimoniales etc). Además los ejercicios que se muestran son muy ilustrativos estan muy bien enfocados y este programa en tiempos de crisis es perfecto.
Con respecto a las actuaciones de la asesora financiera y el asesor puede que tengas razón pero lo verdaderamente importante son los consejos que dán, asique la actuación queda en un segundo plano.