El pasado fin de semana Wikisubtitles, la página web que provee de subtítulos a un gran número de consumidores de series extranjeras, tuvo que cerrar durante unas horas por culpa de unas amenzas de la FAP, por considerar que atentaban contra los derechos de autor. Afortunadamente, y tras asesorarse convenientemente, la página vuelve a estar activa, para alegría de aquellos que necesitan de algún tipo de traducción para disfrutar de grandes, o simplemente entretenidas, obras audiovisuales, que de otro modo nos llegan tarde, mal, a rastras o ni siquiera nos llegan.
Como ya han hecho otros muchos compañeros, hay que destacar el trabajo que llevan a cabo estos filántropos de la red, que tan solo unos minutos después de que las principales series estén disponibles ya se ponen a traducir y subtitular, llevando a cabo un excelente trabajo, en muchos casos a la altura del de muchos profesionales del sector, pero con la gran diferencia de que no ganan un duro con ello, sino que lo hacen por el simple hecho de beneficiar a una comunidad de la que se sienten parte y a la que quieren hacer llegar su producto sin mayor pretensión que la de entretener.
Junto a estos fantásticos profesionales del subtitulado encontramos, sin embargo, a otros que se dedican a subir a los programas de intercambio de programas archivos protegidos con contraseñas, con el único fin de engrosar su lista de suscriptores para quién sabe qué maléficos fines. Grupos de personas que aprovechan el mismo espacio de buen rollo y trabajo en comunidad que se genera compartiendo entretenimiento y cultura para molestar, hacernos perder el tiempo y sacar un beneficio absurdo de unas prácticas idiotas. Normalmente hay otras opciones, muchas por regla general, pero cuando en ocasiones te encuentras de nuevo con uno de estos archivos, yo personalmente me pongo de muy mal humor y me ha parecido justo ponerles hoy de vuelta y media, especialmente con la oportunidad de compararlos.
Volviendo al tema de los subtítulos, muy divertida esta entrada de Casciari al respecto, aunque el trasfondo de la cuestión no tenga puñetera gracia.
«Afortunadamente, y tras asesorarse convenientemente, la página vuelve a estar activa, para alegría de aquellos que necesitan de algún tipo de traducción para disfrutar de grandes, o simplemente entretenidas, obras audiovisuales, que de otro modo nos llegan tarde, mal, a rastras o ni siquiera nos llegan.»
La página no está activa. Lo estuvo algo más de un día hace varios pero está cerrada por el autor.