Recuerdo que en mi infancia habia un programa de televisión que tenía una sintonía cuya letra decía «todo, todo, todo está en los libros, todo está en los libros, tirululi, todo está en los libros».
Hoy en día y en lo audiovisual,podríamos hacer una canción donde la palabra libros se sustituyera por YouTube… bueno, quizá sea un poco exagerado pero es que no deja de sorprenderme suprofundidad.
Ejemplo de hoy: hemos ido al cine a ver «Tú la letra y yo la música» y, al volver, he querido buscar los dos temas musicales principales en Internet. Primera opción: la página oficial de la película, nada. Segunda opción: la página de Apple que remite a iTunes, donde puedes comprar la canción… o no, porque en la tienda española no están disponibles las canciones de esta película. A punto de darme por vencida, después de todo tampoco eran las canciones de mi vida y ya había puesto adescargar una «versión un poco más larga» de los temas, veo que la última opción de la primera página de búsquedas de Google remite a YouTube donde, oh sorpresa, está la canción que buscaba con su imagen original… y no solo esa, la otra canción importante de la película también, y no solo eso, una versión karaoke también…
La verdad es que es un gran error por parte de Warner, la productora de la película, el no incluir la banda sonora en la web.
De todos modos, así funciona internet en la actualidad, yo desde hace un tiempo, cuando quiero escuchar una canción, o buscar un karaoke para reírme con los amigos, o video muy concreto (esto último es algo más normal) voy directamente a «youtube».
Saludos afrutados,
Dexter Le Brown