Los habituales de este blog ya sabréis que soy muy aficionada a Operación Triunfo y ayer tuve una nueva razón para hablar del programa. Cualquier profesional de la televisión sabe, o debería saber, que una de las características del medio es la creación de personajes, ya sea de forma intencionada o espontaneamente por actuaciones puntuales de alguien que se convierten en hitos de un programa y que marcan a personas o personajes para siempre.
Es lo que ocurrió el año pasado con Noemí Galera y su dura crítica a la cantante canaria Idaira, que no cantaba bien pero que en absoluto merecía las despiadadas frases que este miembro del jurado le dedicaba. Desde entonces Noemí Galera se convirtió en sinónimo de bruja, de perversidad y maldad personificada y no hay día que sea presentada en el programa en que no sea abucheada. Algo perfectamente normal, que da vidilla al programa y que aun no entiendo que ella no entienda (valga la redundancia) y que la lleva a decir, como ayer «yo flipo».
Pero, los cabezas pensantes de Gestmusic han tenido una ocurrencia para salvar a Noemí Galera de las iras del público y no es otra cosa que encontrar a alguien mucho más borde que ella, un creativo publicitario con pinta de «yo soy el más moderno», que afirma no tener ni idea de música y buscar únicamente un producto que vender, al que ayer tuvimos ocasión de escuchar en tres ocasiones en las que no veía nada que vender en los concursantes, en las que afirmó salvarles solo porque se lo habían sugerido el resto de miembros del jurado y quién, en el cúlmen de su desprecio, dijo a uno de los favoritos del público «si por mí fuera estarías eliminado».
Siempre he dicho que un concurso de este tipo debe basar parte de su éxito en la dureza de su jurado, pero esta dureza debe venir avalada por unos profesionales que saben de lo que están hablando y tienen la educación suficiente para decirle a los concursantes qué y por qué han hecho las cosas mal, sin insultarles, sin decirles «no entiendo de que vas ni a que te dedicas, a mí no me gustas, pírate…» ahora bien, si lo que buscan es hacer buena a Noemí Galera, con individuos como este sin duda lo van a conseguir.
Sí, este creativo publicitario también fue igual de borde como jurado en la primera y única entrega de El invento del siglo, de Antena 3 y con Carlos Sobera. Está claro que este año buscan dos cosas: 1) «igualar» a Noemí Galera y 2) buscar más «espectáculo» y polémica. Y si no, al tiempo…