Uno de mis propósitos para el nuevo año era no meterme tanto con Cuatro pero claro, ellos siguen haciendo sus cosas a su manera y yo me veo en la obligación de seguir haciéndome las mismas preguntas: la de hoy es ¿para qué ha comprado Cuatro los derechos de retransmisión del emocionantísimo sorteo del Telecupón?
Yo pensaba que sería para ver si con las guapas azafatas conseguían levantar la audiencia pero resulta que, en aras de la modernidad y supongo que considerando aquello algo rancio y machista, las han sustituido por un moderno sistema automático que escupe sola la bolita.
El sorteo en Antena 3 tenía una estupenda audiencia, pero no nos engañemos, la que venía arrastrada del informativo de Matías Prats. En Telecinco también tuvo sus buenos datos de share, pero es que escuchar las meteduras de pata de Carmencita Sevilla era todo un espectáculo circense pero, en este caso, aun no veo cual es el motivo que puede conducir a la audiencia a cambiar de canal para ver el sorteo y, mucho menos aun, al canal para gastarse el dinero en una retransmisión que dura apenas 5 minutos y a la que no se le puede sacar apenas rendimiento.
¿5 minutos? ¡Si apenas duró uno! Parecía que estuviéramos en el bingo, con tanto número seguido. Entiendo lo de las azafatas -se ahorran cinco sueldos-, pero no las prisas.