Según informan algunos medios desde ayer, Telecinco habría sido sancionada con una multa de 300.000 euros por emitir contenidos inapropiados en el programa Sálvame.
Estos contenidos a los que hace referencia la multa, son contenidos sexuales explícitos, que sin estar descritos detalladamente en ninguna de las noticias que comentan el asunto, es más que evidente que se referirán, entre otros muchos del estilo, a la explicación de cómo se utilizan las bolas chinas que nos dio Karmele Marchante hace unos meses o a las reacciones de Mila Ximenez cuando estrenó unas bragas con vibración, dos cuestiones muy simpáticas y sin mayor gravedad en una sociedad moderna, si no fuera porque no son horas de contar esas cosas en la tele.
He comentado muchas veces que la responsabilidad de los programas de televisión respecto a los más pequeños de la casa tiene un límite y que deben ser los padres quienes controlen lo que ven sus hijos, del mismo modo que Sálvame no es, en ningún caso, un programa adecuado para dejar ver a los niños, estén acompañados por sus padres o no. Pero, sea como sea, cuando existe un horario en el que las cadenas de televisión están obligadas a proteger a los menores y no poner contenidos inapropiados, hay que cumplirlo, especialmente cuando no aporta nada y cuando es muy importante para todo el sector que las cadenas se autoregulen y demuestren que tienen sentido común y que no es necesaria una comisión externa que las vigile.
El único problema es que el importe de la multa es lo que se gasta el director de la cadena en tabaco, así que no creo que sirva de mucho….